Vote bien o bote su cédula: Después no se ande quejando de los políticos que ayudó a elegir

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Por: Jose Orlando Montes
@joseorlandom

Tenemos la costumbre de andar reclamando nuestros derechos sin cumplir a veces con nuestros deberes como ciudadano, y la de echarle la culpa a otro sobre lo que pasa en nuestro entorno, sin antes analizar si por nuestra acción u omisión el país va como lo vemos y lo sentimos. Como es el caso de las elecciones del próximo 9 de marzo, fecha en la cual tenemos el derecho a votar, o no hacerlo, pero también el deber de informarnos para tomar la mejor decisión, que luego nos permita denunciar o elogiar con propiedad a quienes le dimos el poder de decidir por   47’661.787 de colombianos[1]. Estamos tan inmersos en nuestra vida diaria que nos hemos acostumbrado a sólo a velar por nuestro entorno inmediato, descuidando al país y quienes lo dirigen por cuenta nuestra, lo cual aparentemente no es tan cercano como el trabajo, estudio, salud y economía personal hasta que se empiezan ver afectadas por las decisiones que toman, y es cuando empezamos a echarles la culpa, siendo que no son los únicos culpables, ya que por nuestra acción u omisión quedaron elegidos.

El 9 de marzo se elegirán los 166 representantes a la cámara y 102 senadores que harán control político, representarán y legislarán por los Colombianos; y debemos hacerlo bien, porque es un día, un solo día cada cuatro años el que tenemos para escogerlos, de lo contrario sólo nos queda la vieja costumbre de seguirnos quejando, pagar por nuestro error y sus errores durante el cuatrienio.

Existen algunas excusas, a veces motivos, para no votar o hacerlo mal; comúnmente la dificultad de locomoción, desconfianza, coacción armada, timidez, indecisión, la y falta de información que nos impide tomar la mejor decisión y evaporar la mayoría de los demás motivos, razón por la cual, en parte,  se han creado algunas soluciones para los desinformados:

•  yovotoyosumo.com donde se exponen los perfiles, temas abordados, y visiones para la gran mayoría de los candidatos a cámara y senado.
• La Silla Vacía (La Silla Electoral) contiene un curioso aplicativo que permite identificar los candidatos más compatibles con nuestras expectativas e ideas, al igual que un tarjetón por cada partido o movimiento político que permite visualizar detalles de sus postulantes, y un mapa con las cuotas de los padrinos políticos, detallada y departamentalizada.
• Congreso Visible.org donde se visualiza información sobre la gestión, ideología, actividad y currículum de congresistas que buscan reelegirse.
• Algunos partidos y movimientos políticos también recopilan información sobre los perfiles, propuestas, posiciones y gestión de la mayoría de sus candidatos. La Alianza Verde, Partido Liberal Colombiano y de U son algunos ejemplos de partidos que cuentan con minisitios donde se amplía información de la mayoría de sus aspirantes al congreso.

Ahora, si lo que está es sobre cargado de información y sigue sin saber por quién votar puede emplear los siguientes criterios que uso para tomar esta importante decisión en ese día en que nos empoderamos para decidir marcando con una X el continuo presente de nuestro país.

Primero, votar por caciques políticos tradicionales con grandes maquinarias puede no ser una buena opción si lo que busca es el bienestar general, ya que como llegan al poder con promesas y debiendo favores, usualmente se dedican a pagarlos priorizando los intereses particulares. “Dime con quién andas y te diré quién eres”, evaluemos con quienes se alían esos que intentan llegar al poder a representarnos ¿o puede ser confiable un candidato que recibe apoyo de grupos al margen de la ley, parapolíticos, corruptos, y clientelistas para financiar su campaña con dineros pringados de sangre, o extraídos de la salud, vivienda, educación e infraestructura de los colombianos?

Segundo, “Árbol que nace torcido, jamás su tronco se endereza”; por favor, revisemos  el historial del candidato por el cual hemos pensado votar. Recordemos que este es el momento de cobrarle con el poder del voto las cagadas que han hecho mientras nos representan, y de las que tanto nos quejamos. Para esto es importante revisar si el candidato asiste a las sesiones del congreso, si ha tenido conductas inapropiadas, si tiene investigaciones o pre investigaciones abiertas, cuántos proyectos de ley ha votado, en cuántos ha sido ponente, ya que esto da cuenta de la gestión de los que se intentan reelegir y si el sueldito + gastos de representación + primas+ tiquetes aéreos+ plan de celular+ vehículo que le estamos pagando se están aprovechando bien. Esta información es posible conocerla en las fuentes suministradas.

Tercero, el filósofo y político británico Sir. Francis Bacon decía “Quien no quiere pensar es un fanático; quien no puede pensar, es un idiota; quien no osa pensar es un cobarde”, por esto es imprescindible conocer las propuestas de los candidatos, sus ideas y posiciones sobre temas coyunturales y estratégicos expuestos en las fuentes citadas, a la vez que facilita el seguimiento posterior. Pero ojo tengamos en cuenta, que en época electoral las promesas vacías y discursos sin fundamento abundan para captar votos, por eso es importante tener en cuenta los dos puntos anteriores, dado que permite encontrar contradicciones entre lo que hace, quién lo apoya y lo que dice que hará.

Con los anteriores criterios y herramientas podríamos tener el juicio suficiente para tomar buenas decisiones en las elecciones del 9 de marzo y las de presidencia que le siguen. Los abstencionistas que no quiere o no puede votar, tengan en cuenta que ese es el día que tiene el poder para castigar a los que hacen poco, y perderá la oportunidad de premiar a los que han demostrado o tienen el potencial para hacer una buena labor en el congreso. Y para quienes piensan votar en blanco, no me incomoda esta poderosa alternativa, ya que envía un claro mensaje de inconformismo frente a la clase dirigente. Pero sí los corruptos hábiles que posiblemente legislarán en cuerpo ajeno si el voto en blanco llega a superar sus votaciones, las aceitadas maquinarias de algunos políticos que tienen sus votos asegurados desde meses, años e incluso décadas, el fuerte golpe a los partidos políticos pequeños o de opinión y la continuidad de los tradicionales si el voto en blanco supera la votación de los primeros y no la de los segundos. Para evitar riesgos sugiero votar bien y hacerlo consciente.

Nota final: Si está leyendo esto, quizás sea un ciudadano activo o informado; haga un servicio social compartiéndolo con otros menos comprometidos.